Un niño ha de tener 20 dientes temporales, que serán sustituidos por 32 dientes definitivos.Cada diente de leche o temporal tiene un diente sustituto permanente. Los dientes de leche no son menos importantes que los permanentes, pues sirven de guía en la erupción a los dientes permanentes y le reservan su espacio en el sitio correcto según su función. Las raíces del diente de le leche se irán reabsorbiendo a medida que el permanente vaya emergiendo justo por debajo de él. Por eso es tan importante la higiene bucal del niño desde la aparición de su primer dientecito. De no ser así, se corre el riesgo de perder un diente de leche antes de tiempo, que los otros dientes cierren su espacio y el diente permanente aparezca fuera de alineación, lo que hará que deba utilizar ortodoncia una vez todos los definitivos hayan emergido para poder restituir su correcta alineación y su función masticatoria.
